QUIEN ENSAYA LO ABSURDO CONSIGUE LO IMPOSIBLE (Unamuno)

sábado, 26 de noviembre de 2011

Golpes de estado encubiertos

Don Mercado Financiero
La situación político-económica en Europa es ya insostenible. Asistimos impasibles al traspaso de poderes en Italia y Grecia. Los medios de comunicación pasan de puntillas sobre el fondo del asunto, e independientemente de la antipatía que sus dirigentes despertaban en amplios sectores de la población, en la práctica este cambio supone reemplazar a los "democráticamente" elegidos por otros, los llamados "tecnócratas", que ni fueron elegidos por el pueblo, ni les resultan siquiera familiares.

Si el sistema democrático actual se hallaba ya de por sí en un estado deplorable, y a pesar de que se haga alarde de que todas las garantías parlamentarias han sido respetadas, esto constituye técnicamente un
golpe de estado encubierto en el que los beneficiarios son los mercados y sus estrategias especulativas salvajes. Lo desgrano, para que quede claro:

¿Sabéis quienes son Lucas Papademos
(actual dirigente Griego tras la dimisión de Papandreu) y Mariano Monti (ahora al frente del gobierno italiano)?
¿Sabéis quién es Mario Draghi
(actual presidente del Banco Central Europeo)?
¿Sabéis lo que es Goldman Sachs?


Os lo explico:


Goldman Sachs
: es uno de los mayores bancos de inversión mundial y co-responsable directo, junto otras entidades como la agencia de calificación Moody's, de la crisis actual, y uno de sus mayores benficiarios. Sólo a modo de pincelada, en 2007 ganaron 4 mil millones de dólares en operaciones que desembocaron en el desastre actual. ¿Cómo lo hicieron? Animaron a los inversores a invertir en productos sub-prime que sabían que era productos basura, y al mismo tiempo se dedicaron a "apostar" en bolsa por el fracaso de los mismos. Eso es solo la punta del iceberg, y está muy documentado, podéis investigarlo.

Papademos
: Actual primer ministro griego, tras la dimisión Papandreu. No elegido por el pueblo.
- Ex-gobernador del Banco de la Reserva Federal de Boston entre 1993 y 1994.
- Vicepresidente del Banco Central Europeo de 2002 a 2010.
- Miembro de la Comisión Trilateral desde 1998, fundada por Rockefeller, lobby neo-liberal (se dedican a comprar políticos a cambio de sobornarles).
- Ex-Gobernador del Banco de Central Grecia entre 1994 y 2002. Falseó las cuentas de déficit público del país
con la ayuda activa de Goldman Sachs, lo que condujo en gran parte a la actual crisis que sufre el país.

Mariano Monti
: Actual primer ministro de Italia tras la dimisión de Berlusconi. No elegido por el pueblo.
- Ex director europeo de la Comisión Trilateral antes mencionada.
- Ex-miembro del equipo directivo del grupo Bilderberg.
-
Asesor de Goldman Sachs durante el periodo en que ésta ayudó a ocultar el déficit del gobierno griego.

Mario Draghi
: Actual presidente del Banco Central Europeo en sustitución de Jean-Claude Trichet.
- Ex-director ejecutivo de del Banco Munidal entre 1985 y 1990.
-
Vicepresidente por Europa de Goldman Sachs entre 2002 y 2006, periodo en que se realizó el falseo antes mencionado.

Bien, qué casualidad, todos de la mano de Goldman Sachs. Los que crearon la crisis se presentan ahora como la única opción viable para salir de la misma, en lo que la prensa estadounidense está empezando a llamar "El gobierno de Goldman Sachs en Europa".

Se tiende a querer hacernos pensar que la crisis ha sido una especie de resbalón, pero la realidad apunta a que detrás de ella hay una voluntad perfectamente orquestada de hacerse con el poder directo en nuestro continente, en una maniobra sin precedentes en la Europa del siglo XXI. La estrategia de los grandes bancos de inversión y agencias de calificación, es una variante de otras llevadas a cabo anteriormente en otros continentes, se viene desarrollando desde el inicio de la crisis y desde mi punto de vista está siendo la siguiente:

1.
Hundimos a los países mediante la especulación en bolsa/mercado. Los volvemos locos de miedo a lo que dirán los mercados, que nosotros controlamos, cada día.

2.
Los obligamos a recurrir a préstamos para mantenerlos en Status Quo, o "salvarlos". Estos préstamos están estrictamente calculados para que los países no los puedan pagar, como es el caso de Grecia que no podría haber cubierto su deuda, ni aunque su gobierno vendiera el país entero, y no es ninguna metáfora, es matemática. 

3.
Exigimos recortes sociales y privatizaciones en detrimento de los ciudadanos, bajo la amenaza de que si los gobiernos no los llevan a cabo, los inversores se retirarán por miedo a no poder recuperar el dinero invertido en la deuda de esos países y demás inversiones.

4.
Se crea un altísimo nivel de descontento social, propicio para que el pueblo, ya sonado, accepte cualquier cosa con tal de salir de la situación.

5.
Colocamos a nuestros hombres donde mejor convenga.

Si os parece ciencia ficción, informaos: este tipo de estrategias están perfectamente documentadas y se han venido utilizando con distintas variantes a lo largo el siglo XX y XXI en otros países, notablemente en latinoamérica por parte de los EEUU cuando se dedicaban, y se siguen dedicando en la medida que pueden, a asfixiar económicamente mediante la deuda exterior por ejemplo a países de América Central, para crear descontento social y aprovecharlo para colocar a dirigentes afines a sus intereses.

Ahora esto está pasando en Europa, y ya no es que lo haga EEUU, sino que lo hace la industria financiera internacional. Y lo que está ocurriendo bajo la mirada impotente y/o cómplice de nuestros gobiernos es
el mayor robo jamás realizado en la historia de la humanidad y a escala planetaria, son golpes de estado, y violaciones flagrantes de la soberanía de los estados y sus pueblos.

Autor: Don Nadie

sábado, 19 de noviembre de 2011

Homenaje a José Antonio en el 75 aniversario de su asesinato


Si puedes mantener la cabeza
cuando todos a tu alrededor la pierden y te echan la culpa,
Si puedes confiar en ti mismo cuando los demás dudan de ti,
pero al mismo tiempo comprendes su desconfianza.
Si puedes esperar y no cansarte en la espera,
o siendo objeto de mentiras, no pagar con mentiras,
o siendo odiado no dar cabida al odio,
y aún así no te las das de santo ni de sabio:

Si puedes soñar, y no dejar que los sueños te dominen,
Si puedes pensar, y no hacer de los pensamientos tu meta,
Si puedes encontrarte con el Triunfo y el Desastre
y tratar a esos dos impostores de la misma manera;
Si puedes soportar el escuchar que las verdades que tú has dicho
son manipuladas por bribones para embaucar con ellas a los necios,
o contemplar destrozadas las cosas a las que has dedicado tu vida
y agacharte y reconstruirlas con herramientas desgastadas:

Si puedes amontonar todas tus ganancias
y jugártelo todo de una vez a cara o cruz
y perder, para volver a empezar de donde partiste
y no decir palabra sobre lo perdido,
Si puedes obligar a tu corazón, a tus nervios y a tus músculos
a servirte en el camino mucho después de que hayan perdido su fuerza
y así aguantar cuando no te quede nada
excepto la Voluntad que les dice: ‘¡Aguantad!’

Si puedes hablar con multitudes y guardar tu virtud,
o caminar entre Reyes sin perder la sencillez,
Si ni enemigos ni admiradores pueden dañarte;
Si aprecias a todos pero a ninguno demasiado;
Si puedes llenar el inexorable minuto
con los sesenta segundos que lo recorren,
tuya es la Tierra y todo lo que hay en ella,
y lo que es más, ¡Tú serás un Hombre, hijo mío! 

Autor: Rudyard Kipling



viernes, 18 de noviembre de 2011

Mala suerte

“Muerto pero mío”- No cesaba de repetir una y otra vez. Esperaba, supongo, recibir algo de consuelo que amortiguara el enorme dolor que sentía tras la muerte de Pere.
Desde que nos conociéramos un año antes, siempre tuve la sensación de que alguien me lo arrebataría. Pero confundí al enemigo...
Le otorgué forma de mujer y fue la mala suerte la que se lo llevó por delante.
Ahora estaba vacía. 
Sólo me quedaba una frase: "Muerto pero mío".
Para cualquiera sería poca cosa, para mí lo era todo.
Jamás iba a poder nadie arrebatarme la exclusividad de ese enorme dolor.

Autora: La Bego





viernes, 11 de noviembre de 2011

Cajas de ahorro

En los últimos meses hemos asistido como si tal cosa al desmantelamiento de las cajas de ahorro, víctimas de una desnaturalización que hunde sus raíces en la expansión del capitalismo financiero y en los abusos de la partitocracia; pero, en la hora de su desmantelamiento, nadie se ha preocupado de indagar la razón de su enfermedad, según la consigna predilecta de nuestra época, que consiste en poner tronos a las causas y cadalsos a las consecuencias. Durante mucho tiempo, las cajas de ahorro fueron instituciones de fomento del ahorro con una vocación social benemérita: captaban depósitos a cambio de un interés razonable; y con el monto de los depósitos captados, efectuaban préstamos a particulares y empresas.

Los beneficios que de su actividad pudieran derivarse eran invertidos en fines sociales, paliando la pobreza, socorriendo a enfermos y ancianos, protegiendo la infancia desvalida. Era un invento propio de una economía natural, que redistribuía la riqueza de la comunidad y favorecía los más loables impulsos humanitarios; entre los impulsores encontramos a muchos próceres instruidos en la lectura de las grandes encíclicas papales de León XIII o Pío XI.

Sobre aquellas cajas de ahorro de iniciativa social no tardaron en caer los buitres del control político y el capitalismo financiero. Así, se impuso que sus órganos de gobierno fuesen nombrados por los poderes públicos; y se eliminaron las restricciones legales a su actividad, para que pudieran ofrecer a sus clientes todo tipo de `servicios financieros´, al estilo de cualquier banco convencional, a la vez que se les permitió extender el ámbito de su clientela, tradicionalmente confinada al municipio o región donde las cajas tenían establecida su sede.

De este modo, sus consejos de administración se poblaron de politiquillos con mando en plaza; y las cajas de ahorro empezaron a prestar el dinero con una finalidad que ya no era social, sino especulativa, atendiendo los intereses de los politiquillos que las regentaban. Por supuesto, tales préstamos dejaron de efectuarse sobre el monto de los depósitos captados; y, en volandas de los birlibirloques financieros, empezaron a prestar un dinero fantasmagórico, según se postula en el catecismo del capitalismo financiero. El resultado de tal metamorfosis desnaturalizadora lo estamos padeciendo ahora. Los medios de adoctrinamiento de masas se rasgan las vestiduras, divulgando los sueldos de escándalo que cobraban los directivos de las cajas de ahorro y los agujeros negros que han originado en nuestra maltrecha economía. Leyendo las noticias que los medios de adoctrinamiento de masas divulgan, diríase que esos directivos voraces que cobraban sueldos millonarios y repartían un dinero fantasmagórico hubiesen nacido por generación espontánea, o hubiesen sido traídos, como las esporas de los hongos, por un viento caprichoso. Lo que los medios de adoctrinamiento de masas no nos dicen es que tales directivos negligentes y codiciosos fueron elegidos por los consejos de administración de las cajas de ahorro, controlados por los politiquillos locales; tampoco nos dicen que los préstamos que concedían y las calamitosas operaciones financieras que autorizaban eran supervisadas (y estimuladas) por esos mismos politiquillos, que se cuidaron de elegir a las personas más dóciles y permeables a su influencia, las más agradecidas de la mano que les daba de comer, las más dispuestas a participar en el contubernio político-financiero.

En un país medio normal, los politiquillos que gobernaban estas cajas de ahorro arruinadas estarían en la cárcel, como responsables de una estafa que, dada su magnitud gigantesca y sus efectos arrasadores sobre la economía nacional, bien podría calificarse de alta traición. Pero estos politiquillos que utilizaron en beneficio propio y de sus partidos unas instituciones venerables nacidas de la iniciativa social, que autorizaron las tropelías más groseras para financiar proyectos megalómanos e inviables, que distribuyeron sueldos obscenos entre sus directivos (para pagar su silencio y su complicidad delictiva) se han ido de rositas, protegidos por sus respectivos partidos y blindados por el propio Estado.

De esta rapiña institucionalizada nada nos dicen los medios de adoctrinamiento de masas; tal vez porque, para su supervivencia, dependen de los mismos que arruinaron las cajas de ahorro, los mismos que ahora nos piden el voto. ¡Ay qué risa, tía Felisa!
 
Autor: Juan Manuel de Prada

martes, 1 de noviembre de 2011

Voces que no cesan

Estoy tratando de no escucharles. Intento no pensar en lo que me dicen pero no lo logro. Me susurran al oído cosas que saben que me gustan, que me interesan, que me excitan. Pero no debo hacerles caso. Son peligrosas. Oprimo mi cabeza con mis manos y les ruego que se callen. Me levanto y enciendo la radio. Supongo que una voz hará callar a otra voz como un clavo quita otro clavo…

Francino pregunta a uno de los contertulios qué opina de la situación económica de Europa y aquel le contesta que, con un poco de suerte, nos recuperaremos dentro de diez años. Mascullo unos cuantos improperios dirigidos a los políticos, los economistas y las madres de todos ellos. No entiendo cómo ese hatajo de personajillos que tienen en su mano nuestras vidas, esos a los que pagamos los sueldos, nos han dejado con el culo al aire. Se ríen de todos nosotros. Apago la radio. 

Como no puedo soportar las voces que se entremezclan en mi cabeza busco una de esas pastillitas que me recetó un psiquiatra amigo mío, que está aún más loco que yo, y la trago con un sorbo de whisky.

“Tú no estás bien. Intenta no estresarte, amigo mío. Eso no te conviene.”
¿Y qué coño sabrá este loquero de lo que me conviene o no me conviene?
¡Como si uno pudiera elegir lo que le conviene!
¡Como si uno hubiera elegido fracasar en todas las facetas de su vida!
¡Como si uno pudiera elegir ser diferente a como es!

Me levanto y enciendo un cigarrillo de marihuana. Aspiro profundamente el humo, hasta los pulmones, hasta que una quemazón horrible me corta la respiración. Con la tercera o cuarta inhalación empiezo a notar cierta relajación. Ya no me quema. Con la última dejo de oír algunas de las malditas voces. Algunas, pero no todas. Me queda una…

Pero para esa voz no necesito pastilla ni drogas. Esa es fácil de acallar.
 Es cuestión de levantarme, pero no puedo. Es curioso. Mi cerebro manda el mensaje a mis piernas pero ellas no se mueven. Es como si no le entendieran. Como si utilizaran códigos distintos… Debe ser por el efecto de las drogas.

Pues de alguna manera tendré que conseguir levantarme para hacer callar a esa maldita zorra. Lleva horas suplicando. Debería habérmela cargado ya.
Es absurdo que grite. ¿Por qué grita si nadie la va a oír? ¿Quién va a venir a estas horas a una vieja casona en medio de la nada? Y menos en invierno, con la que está cayendo…

Sus gritos han cesado. ¿Se habrá dormido exhausta de tanto rogar que le deje marchar? ¿Se habrá escapado? No. Eso es imposible. La he encadenado a la reja del cobertizo y me he asegurado de que no pueda soltarse.
¿Habrá muerto de frío? Eso me facilitaría las cosas…
Se me cierran los ojos. Por fin hay silencio.
Voy a intentar dormir un poco y sólo así dejaré de darme asco a mí mismo por ser como soy y hacer las cosas que hago…
Como si uno pudiera elegir no hacer las cosas que hace…
Como si uno pudiera actuar de una forma distinta a la que sus voces le dictan…

Autora: La Bego